2 Cuece la pasta de acuerdo a las instrucciones del empaque y escurre.
3 Con ayuda de una cuchara, coloca las calabazas en un colador y oprime levemente para quitar el exceso de líquido.
4 Coloca en un tazón las calabazas, el requesón, la taza de queso manchego, el aceite de oliva, los huevos, la harina y mezcla, por último añade la pasta e integra.
5 Salpimienta al gusto.
6 Prepara un molde rectangular para horno con papel encerado cubriendo todos los lados.
7 Vierte la mezcla de la pasta y con ayuda de una cuchara aplana y empareja la superficie.
8 Añade el resto de queso manchego y hornea por espacio de 25 minutos o hasta que el queso gratine y tome un color dorado. Retira y permite que se enfríe.
9 Una vez frío, retira del molde y con ayuda de un cuchillo, corta en cuadros medianos.
10 Sirve a temperatura ambiente.
11 Puedes acompañar con un poco de lechuga y jitomate picado.